En el artículo anterior abordamos unas interrogantes sobre qué estás haciendo para mantener tu negocio y perpetuar tu giro.
Hoy tocaremos unos puntos importantes en ese camino de crecimiento para tu empresa o marca.
Recordemos que una empresa al igual que las marcas se definen gracias a sus objetivos, visión y filosofía entre otros aspectos no menos importantes.
Si bien eso ayuda a determinar la conducta una la empresa no implica una negación al cambio o dicho de otra forma, una adaptación a las situación actual, al cambio social, al impacto del tiempo y el pensamiento colectivo. Eso quiere decir que tú marca o negocio puede llegar a actualizar, modificar, mejorar o reajustar aquellas razones que dan movimiento cuál motor al actuar de la empresa en su día a día.
Seguro te preguntarás ¿Qué tiene eso que ver con el cambio y perpetuidad de mi empresa?
Pues tiene todo que ver, una marca o negocio que no se adapta a las situaciones difícilmente sobrevive a la presión económica, social, cultural y política. Así que analízalo, en el cambio está la perpetuidad.
Pero no es el único cambio a considerar para tener un crecimiento, si quieres que tu empresa o marca sigan manteniéndose en el tiempo es necesario dejar atrás todas esas malas prácticas que afectan considerablemente tu negocio, aquellas prácticas que sabemos que están mal pero qué «como la chamba a pesar de todo salió» seguimos realizando una y otra vez.
Todas esas prácticas que aunque no lo parecen representan un riesgo financiero ya sea porque se gasta mayor materia prima, se pagan tiempos extra innecesarios o malas cotizaciones que resultan en mayores gastos.
Este tiempo no es para derrochar sino para administrar bien todos los recursos, tanto financieros cómo humanos, por ello es importante comenzar ya un plan de optimización de recursos. Si en tu empresa aún no se aplican éste momento es el adecuado para hacerlo.
Pero ¿Seguro que eso hará que mi empresa crezca? La respuesta es si, formará parte de ese crecimiento empresarial. El despilfarro de cualquier recurso siempre será sinónimo
de pérdida, no importa si es a corto, mediano o largo plazo. Optimiza tus gastos, compras y nóminas y comenzarás a ver un importante cambio.
¿Habrá otro paso a considerar para crecer tu marca? Estoy seguro que sí, hay muchos más. Ya hablamos de la adaptación al cambio y la optimización de recursos, es importante no dejar de lado aspectos como la innovación y la diferenciación, pero vamos por partes.
La innovación en términos burdos significa hacer u ofrecer algo funcional, diferente y revolucionario, pero eso no significa tratar de inventar el hilo negro ni invertir enormes cantidades de dinero, no confundamos el término innovar con gasto o desgaste.
Una empresa puede ser innovadora ofreciendo nuevas técnicas de producción pero también lo puede ser al modificar sus procesos y eso en vez de un gasto es una inversión bastante económica. Para este punto te dejo de ejercicio que analices qué tiene ya tu empresa que pueda implementar de diferente manera para poder innovar.
En este medio Impresión podrás ver una amplia gama de empresas que se dedican a dar reconocimiento a tu marca, no olvides ver cada una y encontrar aquella que se adecue a las necesidades que tiene tu negocio para distinguirse de los demás.
En el siguiente artículo abordaremos más sobre el tema de la diferenciación.
Victor Malváez
Karati